Hola a tod@s!
Después de apurar
hasta el último momento para tener el coche en condiciones de afrontar el duro
reto que nos teníamos fijados, por fin partimos dirección Génova, hicimos noche
en un hotel en Salon de Prodence, en Francia,que nos había buscado María para seguir ruta a
tomar el Ferry camino de La Golette en Túnez.
La travesía fue
tranquila y desembarcamos a la hora prevista, cómo siempre los trámites
aduaneros y de pasaportes nos lleva su tiempo, una vez arreglada la documentación
nos ponemos en marcha, ya en la autopista nos encontramos con la primera
sorpresa, se nos queda averiado el coche de Emilio y Mercedes y no puede seguir
camino ( lo confirmaron al día siguiente), nos quedamos todos un poco serios
pues sabemos de la ilusión con que preparan los viajes nuestros amigos……………….y
se nos quedaban “descolgados” del grupo, como no podía ser de otra manera, pues
el viaje debía continuar.
Reanudamos marcha
hasta llegar a dormir a Matmata al hotel Diar Barbar, nos esperan casi 500 Kms.
De carretera y autopista, allí ya vemos que hay muchos cuatreros, casi todos
italianos, esto ya será casi una constante en los puntos de encuentro que
teníamos fijados para descansar, salvo las acampadas, claro!
A la mañana
siguiente ya nos encontramos mal tiempo que se convertiría en una tormenta de
arena que nos acompañó dos días, dos días que se hicieron antipáticos por
aquello de que no nos dio tregua y comíamos y cenábamos con arena, dormimos con
área y el aseo……………………con arena.
Yo anduve cuatro días con la arena en los ojos, bueno, seguimos camino hacia el oasis El Faouar dónde habíamos quedado con el guía Hedi, yo ya le conocía de otras ocasiones, nos aprovisionamos de pan para cuatro días y de gasoil para meternos en el interior del Gran Erg Oriental, un poquito de pista y empezamos con unas pequeñas dunas, y después…………más dunas.
Yo anduve cuatro días con la arena en los ojos, bueno, seguimos camino hacia el oasis El Faouar dónde habíamos quedado con el guía Hedi, yo ya le conocía de otras ocasiones, nos aprovisionamos de pan para cuatro días y de gasoil para meternos en el interior del Gran Erg Oriental, un poquito de pista y empezamos con unas pequeñas dunas, y después…………más dunas.
Y ya se sabe,
bajar presiones.
La primera noche
de acampada, más o menos la pudimos sobrellevar bien por la tormenta pues de cuando en cuando
aunque el viento no paraba si paraba de volar la arena. Preparamos el
campamento e hicimos una BBQ con panceta y demás viandas traídas al efecto.
Reanudamos la
marcha al día siguiente y siguiendo los waypoint, hacemos una parada para coger
las bonitas rosas del desierto que luego podremos regalar a familiares y
amigos.........
La idea era la de acampar cerca de Tembain, un lugar con dos montañas altas que se divisan a distancia, estamos haciendo los cordones de dunas, más de veinte en el sentido más difícil, pero lo cierto es que nuestro contacto con la arena deja buenas sensaciones, el grupo sortea las dunas con habilidad y destreza, si bien es inevitable tener alguna que otra atascada, e incluso algún desllante, en un momento de indecisión me equivoqué en el camino a seguir la rodera y al rectificar bruscamente………………………..Zas! la líe!
La idea era la de acampar cerca de Tembain, un lugar con dos montañas altas que se divisan a distancia, estamos haciendo los cordones de dunas, más de veinte en el sentido más difícil, pero lo cierto es que nuestro contacto con la arena deja buenas sensaciones, el grupo sortea las dunas con habilidad y destreza, si bien es inevitable tener alguna que otra atascada, e incluso algún desllante, en un momento de indecisión me equivoqué en el camino a seguir la rodera y al rectificar bruscamente………………………..Zas! la líe!
El ritmo es bueno
y afortunadamente apenas hay percances entre los coches, el objetivo está cerca
y llegaremos a tiempo de poder acampar en el oasis de Er Reched.
A media tarde y
después de sortear los últimos y más complicados cordones de dunas llegamos a
Er Reched, particularmente me decepcionó ver tantos coches, parecía una romería
y lo que para mi era un hito ya dejo de serlo un poco, hay que entender que
había muchos coches pues los italianos habían aprovechado sus vacaciones de
Semana Santa para hacer esta excursión…..
Toca recoger para proseguir el viaje......
Una vez preparada
la acampada algunos valientes se dispusieron a buscar la botella con los
nombres de los viajeros que habían dejado en el viaje anterior, y digo lo de
valientes ya que sabíamos de la dificultad de encontrarla a pesar de tener el
punto GPS, pero ya se sabe de las pequeñas variaciones y de que las orillas y
la flora del oasis ha cambiado, yo no eche una mano con la pala pues estaba
pendiente de una pequeña avería en la rótula de mi Toyota.
Ya al día
siguiente nos pusimos en marcha para llegar a Ksar Guilane para llegar a dormir
al camping, lo cierto que íbamos bien de tiempo pero las cosas se complicaron
un poco, primero se nos atascó ( nunca mejor dicho) una bajada de una duna en
una terraza, primero me atasqué yo y después María, perdimos bastante tiempo
pues el rescate, a pesar de la habilidad de los compañeros, rea dificultoso por
el espacio en el que nos movíamos, y después de esto al guía se le rompió la
trasmisión y no podía dar marcha atrás, por lo que en cuatro ocasiones tuve que
tirar de winch para poder sacarlo……………….Llegamos por la noche y después de
tanta tormenta de arena y demás, no veáis cómo se agradeció una ducha para
quitar un par de kilos de arena.
NO, no, la foto
de más arriba no es la famosa “saharita”, se trata de una discusión por la
ubicación de las camas………….
A la mañana
siguiente ya se marchó el guía y pensábamos hacer unas dunas hasta el fuerte Le
Clerc y después hasta Douz, yo tenía la rótula algo tocada y María también
tenía algún problemilla, por lo que decidimos no “tentar” a la suerte e
iniciamos camino por carretera, pasamos por Ksar Hedada y desde allí fuimos a
dormir a Sousse.
Al día siguiente,
nos pusimos en marcha para llegar a Hamamet, allí nos estaba esperando Emilio,
que nos recibió con mucha alegría, nos fuimos a comer y por la tarde compras y
demás……….por la noche, después de cenar cumplimos con el ritual de descorchar
dos botellas de champán para brindar por el término del viaje y por que “a la
postre” regresábamos todas las personas, que es lo más importante en estos
casos.
Por la mañana,
desayuno y camino del puerto, ya se sabe……………esperas, tramites portuarios y
embarcar para Génova, en esta travesía de regreso ya se movió algo más el
barco, cosa leve.
Por fin
desembarcamos en Génova y carretera para España, Ignacio y Mario, y Fernando y
Emilio decidieron irse del “tirón” para casa, de camino los demás cogimos un
hotel para descansar, creo que un IBI, cena de lo que aún nos quedaba y a
descansar.
Por la mañana
Gregorio y Alberto y un Antonio y un servidor acordamos tirar para casa un
poquito más rápidos.
Al final todos
llegamos bien, lamentablemente el percance del coche de Emilio, el resto de
vehículos con alguna gotera, pero bien……
Queremos
aprovechar para dar las gracias, tanto Antonio, mi copiloto y navegador y un
servidor, a todos los componentes del grupo por lo bien que nos hemos adaptado,
la buena harmonía y el buen rollito.
Gracias a
Escipión y María Angeles por el cuidado con que preparan estos viajes para sus
amigos, todo sale rodado y muy coordinado, esos preparativos, la documentación,
etc…. gracias a María y Jesús que cuando ha hecho falta hemos tirado de sus
conocimientos lingüísticos para despejar dudas, a Gregorio y Alberto, gente
tranquila y muy bien avenidos con una integración total, de Fernando qué decir!
El hombre tranquilo………………y silencioso, de Ignacio y Mario, un tandém estupendo
que espero les una aún más, seguro, y de Emilio y Mercedes, que ya conozco de
otros viajes, sólo sentir el que no nos pudieran acompañar y compartir esta
bonita aventura.
Hasta la próxima!
Más abajo os dejo
el enlace de los comentarios que realice del viaje, no me extendí mucho, los
detalles me los guardo para los protagonistas.
Saludetes!
Jaime, muy interesante tu Blog, se nota que tienes alma de viajero, no de turista.
ResponderEliminarSigo tus crónicas desde ahora, un abrazo.
Iñaki.